La vulva
-En una exposición fotográfica privada donde el tema era la masturbación femenina había una parte de la galería con muchas fotografías de vulvas, al verlas me preguntaba si yo podría reconocer mi vulva en una exposición así. Y aunque ya había visto mi vulva muchas veces no creo haberle puesto suficiente atención para distinguirla entre varias. A las lectoras ¿podrías identificar tu vulva entre varias si te mostraran una serie de ellas?
-Otro día me encontraba en una reunión con amistades aclarando que la vulva no se llama vagina, que la vagina es el canal por donde salen los bebés, o lo que se penetra y la vulva es la entrada, ese maravilloso lugar del cuerpo que contiene labios y clítoris.
-Dentro del consultorio o en mis relaciones me han preguntado cómo encontrar el clítoris y cómo tocarlo.
Es evidente que evitar nombrar a los genitales por su nombre es una manera de esconderlos y de encubrir su función más allá de la procreación. La mujer ha sido tan oprimida en sus deseos y decisiones en los últimos siglos (en culturas prepatriarcales esto no sucedía) que a lo largo del mundo hay mujeres que son mutiladas y/o son confinadas a la función reproductiva y de esta manera les arrancan brutalmente la posibilidad del placer y autonomía; a otras tantas nos llenaron de culpas y vergüenza por ver y sentir nuestro cuerpo, así nos separaron del deseo y del placer.
¿Qué hacer para apropiarnos de nuestra vulva, deseo, cuerpo?
Primero nombrando como es: VULVA, segundo comprendiendo que lo que hemos visto en las revistas o películas es ciencia ficción; las mujeres tenemos vulvas con formas diversas, hay labios cortos, largos, morenos, apiñonados, más oscuros, largos, cortos, asimétricos, de sabores y olores diferentes, unas tenemos vellos, otras no, el glande del clítoris a veces es más grande, otras pequeño, pero TODAS SON BELLAS.
Así mismo explorarnos nos ayuda a apropiarnos de nuestro cuerpo, hay que observarlo, olerlo, saborearlo, escucharlo y sentirlo; tomar un espejo, iluminar nuestra vulva y verla es una buena técnica para comenzar a conocernos. Investigar, leer, escuchar es un buen apoyo, te invito a que en Instagram busques #vulva, aquí encontrarás cuentas que pueden mostrarte información, también hay podcast y videos con esta temática en otras plataformas donde puedes aprender.
Por otro lado, saber que la culpa o vergüenza no viene de nosotras porque así lo decidimos, sino que han sido los mensajes que recibimos y que al día de hoy nos limitan. Por eso, te invito a que te hagas acompañar en este proceso, ya que regresarnos a nuestro cuerpo, deseos y decisiones no es algo que se dé en automático, es un camino en el que hay que recuperar lo que nos han arrancado, prohibido, violentado o negado.
En esta entrega quise hablar sobre la vulva porque reconocerla, cuidarla, amarla es una manera de construirnos como personas deseantes y no personas siempre a disposición de ser deseadas, personas con autonomía de decisión y no objetos de opresión.
En otra entrega les enseñaré a tener placer desde sus vulvas 😉 Recuerda que estoy para acompañarte, puedes visitar mi IG @kokozett y te responderé las dudas que desees.
